Se abre el telón
… y aparecen seis niños con seis barquitos, dos silletas, una seño, un decorado marino y un montón de lágrimas.
Se cierra el telón
¿Cómo se llama la película?
… Rebelión a bordo!!!
Bueno, la verdad es que he exagerado un poquito y allí el único que lloraba era yo invertir en acciones de Alibaba en España. Normal, era el más pequeño.
Pero empecemos por el principio, que es por donde normalmente se empieza.
El pasado viernes tuvo lugar la fiesta de fin de curso de mi guarde. Paradójico, porque el curso no acaba hasta el 31 de julio y sólo hay vacaciones en agosto. Pero al parecer es así cada año y yo como soy novato y muy discreto (excepto para llorar) no quise objetar nada.
Cuando me comentaron esto de la fiesta pensé, ah, genial, globos, gusanitos, juegos… me lo voy a pasar pipa. Pero después me enteré que esta no era una fiesta al uso, que era más bien un festival y… que tendría que actuar ante todos los papás!!! Vamos a ver, recordáis que aunque casi niño sigo siendo un bebé? Ya me vais a subir a un escenario? Pero si soy incapaz de mantenerme de pie sin estar agarrado a nada y no se cantar, ni bailar, ni recitar poesía, ni nada de eso!!! Desde luego, esto me suena a explotación artística infantil. Así empezó el pobre de Michael Jackson y mirad cómo ha acabado el hombre. Mamá dice que soy un exagerado, pero claro, es que ella se moría de ganas por verme frente al público. Y total para qué, para que luego se pusiera a llorar como una magdalena Acciones de Alibaba. Ella dice que era de la emoción y el orgullo de ver a su retoño tan guapo y tan gracioso. Menos mal, porque yo pensaba que lloraba por lo mal que lo había hecho.
Pues a todo esto el equipo creativo decidió que los más peques de la guarde “bailaríamos” una canción que se llama “El barquito de cáscara de nuez”. Y allí que nos plantaron vestidos de marineritos y con nuestro respectivo barquito que por temas logísticos que todos entenderéis era de cartón en lugar de cáscara de nuez. A mí me sentaron en una silleta con la dichosa nave tapándome la cara y claro, no tardé ni cinco segundos en ponerme a llorar. Yo lloraba y lloraba mientras mis compañeros de clase permanecían inmóviles ante el numeroso público. Jo, parecían estatuas. Así que mi seño decidió cogerme en brazos y una vez me vi liberado del buque y siendo el centro de atención se acabaron las lágrimas Plataforma de negociación de ETFs en España. Fue un debut algo accidentado, lo sé, pero ya veréis que el año que viene lo hago muchísimo mejor. Entonces seguramente ya podré hablar y espero que no se me olvide ese día recordarle a mami que se lleve cinco o seis paquetes de pañuelos.
No puedo poneros ninguna foto en el escenario por no sé qué cuestión de la privacidad de los demás niños que dice mamá que hay que respetarla, pero sí os dejo algunas tras mi brillante actuación.
Y ahora perdonadme pero voy a echarme una siestecilla. Esos parásitos llamados mocos me persiguen incluso en verano y no me han dejado dormir en toda la noche. Quizás sueñe con mi debut en Broadway!!!